Con paciencia y buena compañía se superan los problemas 😉
Al acabar la SR de Navarra ya estábamos barruntando hacer algo por el sur el puente de todos los Santos y queríamos tirar la piedra hasta Linares. La última semana antes del puente, la previsión del clima era mala por aquella zona así que dejamos la inscripción preparada para otra ocasión y nos pusimos a mirar dónde podríamos librar la lluvia y que no hiciese demasiado frío. Vimos que las zonas de paso de la SR de Valderredible que organizamos desde el club Astorga Randonneurs daba una tregua el tiempo y que tendríamos algún rato hasta 25°C y de temperatura mínima, los 5,5°C que tuvimos el amanecer del primer día camino del puerto de Carrales... Así que ya estaba liada la cosa y comenzamos el jueves a las 6:05 desde Polientes de manera oficial, llegando allí desde mi casa (13km de llaneo).
Jueves día 31 (237km - 4325m)
La mañana amaneció con nubes y la zona de Burgos se veía muy cerrada. Según íbamos acercándonos al puerto de la Matanela se iba despejando cada vez más, aunque el viento empezó a hacer acto de presencia. Ya en la Vega de Pas y durante el ascenso de Estacas de Trueba el viento nos castigó bastante. Llegamos a Espinosa pasados los 100km y repusimos fuerzas en la pastelería y en la cafetería de costumbre en la plaza mayor.
Acto seguido comenzaríamos el ascenso al Picón Blanco, puerto de 7,8km a casi el 10% de media. Manuel pasa un mal rato por llevar la espalda tocada 😞 Arriba del puerto la sorpresa fue que la garita donde solemos sacar la foto de control la han derribado también en las labores de derruir la antigua estación militar!!
Bajada larga para ir haciendo el bucle de puertos vizcaínos con giro hacia Cantabria de nuevo por Otañes. Esta primera tirada llegaríamos a Ampuero a cenar y descansar sobre las 21h de la noche. No me gusta demasiado rodar de noche, pero con buena iluminación y compañía se disfruta también de las carreteras casi solitarias 😉
Viernes día 1 (254km - 5359m)
Al día siguiente teníamos la etapa reina dado que queríamos alargar hasta Soto una vez descendido Palombera por la vertiente de Reinosa. Fue toda una experiencia que posiblemente sólo no me habría planteado nunca: ascender las colladas de Ozalba y Carmona de noche así como Palombera. La noche fue espectacular y la previsión de no tener nubes se cumplió y pudimos disfrutar de esos bellos parajes para nosotros solos y alguna vaca y/o caballo que andaba paseando a sus anchas 😂
Durante el día hicimos el primer sector de puertos desde la Aparecida hasta Alisas para desayunar en Liérganes como suele ser habitual. Después estirar por la costa hasta la casa azul en Tánagos (Unquera). No deja de apasionarme aquel enlazado de pueblos costeros que conectarán después a través del desfiladero de la Hermida con las 3 colladas. Día espectacular el que tuvimos!
Llegaríamos al hostal de Soto a las 00:45 para ducha rápida y a descansar. Aprovechamos a cenar en Valle de Cabuérniga unas croquetas con un entrecot a la piedra con patatas y pimientos y de postre tarta de queso 😋😋
Nos preguntaron en el restaurante que si estábamos entrenando para el soplao... ¡Más o menos! 🤣
Sábado día 2 (122km - 1914m)
Ya el sábado con los deberes hechos y jugando con el margen de tiempo de las 60 horas, acometemos Alto Campoo y Golobar con ritmo adecuado para no forzar demasiado la maquinaria y poder llegar con 2,5 horas de margen final. Aprovechamos a comer a las 13h en Barruelo y ya la parte final dando algún relevo y disfrutando del buen tiempo que tuvimos.